Exposición de grabado y obra gráfica

Exposición de obra gráfica de Diana Aitchison. Del 6 de marzo de 2013 al 30 de abril de 2013.

Fundacion CIEC (Centro Internacional de la Estampa Contemporánea)
Rúa do Castro, 2
15300 Betanzos, A Coruña
Tel.: 981 772 964
Inauguración el próximo sábado 9 de marzo a las 20 horas.

Reseña: La vocación de las técnicas gráficas es posibilitar la multiplicación de una imagen a través de la estampación de una matriz. En principio se supone que se trata de la repetición de una misma imagen para su difusión comercial, sin embargo desde que los artistas han experimentado con las posibilidades expresivas de estos procesos técnicos, han aprovechado la repetición inherente para desarrollar variaciones dentro de un mismo proyecto. Pensamos en las múltiples pruebas de estado de Rembrandt que el mismo conservó -prueba del valor que les confería- o en las variaciones paisajísticas de su contemporáneo Hercules Seghers, uno de los primeros artistas en aplicar declinaciones de colores a la imagen grabada, ambos son también pintores. Gracias a estos grabadores artistas, frente a los artesanos reproductores, el arte gráfico integra sensibilidades de  otras disciplinas a la vez que desarrolla procesos creativos propios. Hoy más que nunca, el arte gráfico contemporáneo atiende, desde la trasgresión de los géneros, a su vocación de repetición para desplegar una realidad en esencia fragmentada y múltiple.
El paisaje es un género que se presta especialmente al despliegue de variaciones, según los efectos atmosféricos, consecuencia de las estaciones o de las horas del día, pero también como metáforas de estados de ánimo. Por eso, las impresiones de los paisajes de Diana no pueden ser nunca iguales.
Sobre la matriz, Diana pinta, con carborundo y barnices, esbozos de paseos por la costa o por caminos arbolados: recuerdos de imágenes experimentadas en su realidad vivida, reciente o pasada, en la Galicia adoptada o en la campiña inglesa de su infancia, pero también en la memoria de la pintura -Corot, Courbet, Constable, Cezanne, …
En la estampación se concretan visiones de luminosas playas o dramáticas rocas, campos y caminos idealizados, en una gran diversidad de posibilidades expresivas. Diana aplica las tintas, retira lo sobrante, define las luces y las sombras, el momento del día, la estación precisa, la evocación de unos sentimientos; recrea en cada estampa una de las infinitas hipótesis.
Desde los negros y los sepias más profundos, nos sumerge en ambientes densos en los que algún brillo abre una esperanza de escape. Otras veces el paseo es liviano, cuando juega con la armonía de sutiles y discretos colores, o al contrario nos estimula con unas combinaciones aciduladas de las más atrevidas. Todas son sugerentes, ninguna prevalece sobre las otras.
El día siguiente será otro día, y Diana volverá a empezar, con nuevas ilusiones; la ilusión renovada es el motor de su trabajo. Y así de estampa en estampas Diana Aitchison nos regala amplias series de momentos posibles o imposibles: recuerdos y sueños de paisajes.  Anne Heyvaert, 4 de marzo de 2013.